Expresamos nuestra profunda solidaridad de clase con los millones de trabajadores inmigrantes, los millones de los refugiados que están enfrentados con la doble explotación, no solo como parte de la clase trabajadora sino también como inmigrantes.
Todos los trabajadores, tanto extranjeros como locales, son hermanos de clase y sus luchas son comunas, a pesar de su nacionalidad, raza, color de piel o religión.
La FSM llama a la clase trabajadora internacional para que siga expresando su solidaridad con los inmigrantes y los refugiados, especialmente ahora que la agresividad y las guerras imperialistas han creado ingentes olas de refugiados.
La discriminación racial y los otros tipos de discriminación se crean y se mantienen vivas por los monopolios, las empresas transnacionales, los mecanismos imperialistas y los gobiernos reaccionarios para dividir a los trabajadores y salvaguardar la explotación clasista.
La FSM conjuntamente con sus afiliados y amigos en cada rincón del mundo seguirán luchando por los intereses de la clase trabajadora, contra la discriminación racial generada por la barbarie capitalista.
Basándose en esta percepción, la FSM reivindica:
– La abolición de los Convenios de Dublín y del Tratado de Schengen, de Frontex y de todos los mecanismos de represión
– El cese de las medidas promulgadas por la UE para la represión en las fronteras.
– El fin de las intervenciones imperialistas de la UE- los EEUU y la OTAN.
– Traslado inmediato de los refugiados desde las islas y los puntos de entrada a los países de su destinación final.
– Aumento de personal y de infraestructuras por el rescate, la identificación de registro, la vivienda, la alimentación, la asistencia médica y el traslado seguro de esa gente.
– Creación de dignos centros de bienvenida y hospitalidad.
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