Estamos observando un deterioro paulatino de la soberanía nacional, cuando debemos reforzar la misma como consecuencia de una lucha generacional y de acumulación por garantizar un país libre y soberano. Las actuaciones de las actuales autoridades, es una afrenta a todos aquellos hombres y mujeres mártires que entregaron sus vidas luchando por la soberanía total.
El gobierno nacional está permitiendo a usanza la injerencia de tropas del Comando Sur del Ejercito de los Estados Unidos, sobre la base de la mal llamada ayuda humanitaria, ocultando sus oscuros intereses, quedando evidenciado con la reinstauración del Centro Multilateral Antidrogas (CMA), ahora con el nombre de Centro Regional de Operaciones Aeronavales (CROAN), donde se integra una fuerza Marítima Conjunta con el objetivo de reforzar el combate al crimen organizado bajo el mando de las fuerzas especiales del Ejército de los Estados Unidos con labores de inteligencia militar y preparación de la logística para atacar a cualquier pais de América latina y del Caribe que se haya salido del orden democrático norteamericano.
El gobierno nacional acaba de firmar el Memorándum de Entendimiento que pone en ejecución el CROAN.
La actitud cómplice del gobierno frente al saqueo abierto que dos empresas multinacionales como los son Panamá Ports Co. concesionaria de Puertos en áreas de acceso al canal por veinte tres (23) años de operaciones con ingresos exorbitantes del cuatro (4) mil millones de dólares, de los cuales solo han pagado al fisco panameños la risible suma de ocho (8) millones de dólares y ahora le refrendan el contrato bajo las mismas condiciones.
La otra empresa es la referente a la explotación de la Minera Petaquilla a quien los gobiernos neoliberales le han reservado la exclusividad de la explotación de todos los recursos minerales, pagando irrisorias sumas de dividendos al Estado panameño. La Corte Suprema de Justicia le declaro el contrato de Petaquilla S.A inconstitucional.
Los distintos gobiernos han concedido instalaciones de empresas transnacionales, en las llamadas zonas francas, con la condición de concederle todos los exuberantes privilegios a sus altos ejecutivos, con legislaciones paralelas al Código de Trabajo, con excepciones de pagos de los impuestos y muchas otras prebendas e incluso la negación o prohibición a que los trabajadores se puedan organizar sindicalmente.
Con estas empresas leoninas, el pais ha cedido derechos sobre sus riquezas nacionales, situación prohibida por la actual Constitución política.
La Central Nacional de Trabajadores de Panamá, denuncia al Gobierno Nacional por desatender sus potestades soberanas y jurisdiccionales ante empresas multinacionales permitiéndoles toda clase de ventajas y concesiones, y frente al gobierno de los Estados Unidos que le ha autorizado instalar bases militares en nuestro territorio disfrazadas de ayuda humanitaria y de combate al trasiego de drogas y de armas.
Los trabajadores organizados junto al resto de las organizaciones sociales y populares tenemos el deber de combatir la violación a nuestra soberanía nacional y denunciarlo ante los organismos multilaterales del derecho internacional, organismo de paz y foros internacionales, todo esto haciéndolo en Unidad para defender a nuestra patria que hoy se ve lesionada en su tejido social y espiritual.
Resistir, luchar y vencer.
¡Venceremos!, Panamá, 13 de febrero de 2021
