El personal médico, enfermeras y administrativos del Hospital San Miguel Arcángel se unió al paro de labores que decretaron desde ayer los galenos del Hospital Santo Tomás y de la Especializada del Complejo Hospitalario de la Caja del Seguro Social (CSS) motivado por la exigencia del pago de sus horas extraordinarias.
El cuerpo médico del San Miguel Arcángel solo prestará los servicios de urgencias y dará atención a las hospitalizaciones críticas. Sin embargo, han suspendido las consultas externas y las cirugías electivas.
Tanto el personal de salud como los administrativos de este nosocomio anunciaron que continuarán montando piquetes pacíficos a orilla de calle, en protesta por el atraso en el pago de sus turnos extras.
El San Miguel Arcángel es un hospital de segunda categoría y atiende a una población de 315 mil habitantes del distrito de San Miguelito, así como de los corregimientos de Chilibre y Las Cumbres.
El presidente Juan Carlos Varela, indicó que el paro médico “no tiene ningún sentido”, ya que el Estado ha cancelado el 95% de los turnos extras trabajados que corresponden a noviembre y diciembre de 2016.
“Están afectando a ciudadanos y es una actitud incorrecta. Los cheques van a salir esta semana, pero ¿quién recupera tiempo perdido ?”, se preguntó el mandatario, tras detallar que están recibiendo el cheque más grande de su historia, un 20% adicional a sus salarios.
Los galenos continúan con su medida de presión, pese a que el ministro de Salud, Miguel Mayo, se comprometiera a que este miércoles cancelarían los pagos adeudados.
Según Mayo, esta última quincena los médicos recibieron el aumento negociado para el 2017 y el retroactivo de enero a marzo.
Ángel Cedeño, director médico del Hospital Santo Tomás, ha manifestado en reiteradas ocasiones que el retraso del pago se produjo por un cambio en el sistema informático de la institución.
El funcionario afirmó que en la primera quincena de abril de 2017 a los médicos se les hizo efectivo un aumento del 20%, que representa $650 mil, incluyendo el retroactivo de los tres primeros meses del año.
Solo en la Especializada del Complejo hay 230 médicos residentes y 150 internos que se unieron a la medida de presión. Mientras que en el Hospital Santo Tomás hay 150 especialistas y otros 300 internos y residentes que apoyan el paro.
Tomado de La Estrella de Panamá 18 de abril de 2017
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