El país se encuentra en una encrucijada muy difícil y compleja, producto de los graves problemas en que están inmersas todas las instituciones del Estado, y no se ven alternativas para solucionarlos. Pareciese que la estrategia es llevar al pueblo al sufrimiento y agotamiento de sus reclamos, pero estamos seguros que el pueblo, no cejará en demandar soluciones a sus múltiples necesidades.
El pueblo reclama trabajos productivos dignos y decentes, agua potable que llegue a todos los hogares las veinticuatro horas en forma permanente, salud y educación pública accesible y de calidad para todos, salarios que permitan una vida decorosa, seguridad ciudadana en todo el país, una política exterior consecuente al Estado soberano e independiente que somos, levantar por encima de los TPC al sector agropecuario, para garantizar así la seguridad y soberanía alimentaria del país. Nuestro pueblo demanda pensiones dignas, que contribuyan al bienestar social de los pensionados, así como la garantía de medicamentos e insumos oportunos para salvar la vida de los que así lo requieran.
Pero también somos conscientes que sin una fuerza organizada del pueblo, será difícil lograr los resultados que deseamos de éstas demandas justas y sentidas. Las condiciones objetivas están dadas para generar en las fuerzas subjetivas, la potencia requerida para asumir un rol mucho más beligerante con el poder social necesario, para hacer las transformaciones que se requieran hacer.
El pueblo se está manifestando espontánea y coyunturalmente, ya no reconocen ningún liderazgo proveniente de aquellos partidos que se han alternado el poder político post invasión, reclama un liderazgo fresco, transparente y honesto, con humildad firme y consecuente, que retome el camino hacia la liberación nacional encarando las políticas
nefastas neoliberales que vienen cercenando los derechos sociales de los panameños.
Requerimos de un pueblo organizado que incluya la participación de las capas medias, la intelectualidad progresistas, a productores comprometidos con el desarrollo agropecuario, empresarios nacionalistas, estudiantes, trabajadores, campesinos y a los hermanos originarios, es decir un pueblo qué tomé la bandera del nacionalismo, que proteja y desarrolle el aparato técnico productivo del pais, para encarar una nueva orientación y visión política de
la nación panameña.
La Central Nacional de Trabajadores de Panamá, es consciente que las condiciones objetivas del país ya están lo suficientemente creadas para dar el salto cualitativo y animar a desarrollar las fuerzas subjetivas para que el pueblo se organice en un Frente Nacional Democrático, como alternativa viable única, para rescatar y salvar la nación de las garras de la corrupción y de la impunidad, condiciones necesarias para la refundación de un nuevo Estado Nacional, para ello se requiere de un pueblo consciente y organizado bajo una sola vanguardia revolucionaria, progresista y patrióticas encabezada por la clase obrera. ¡Venceremos!
Panamá, 31 de agosto de 2018
Paginas web que comunican e informan al trabajador. Marketing Sindical. www.monagrillo.net
