Los problemas socio económico del país se sigue agravando gobierno tras gobierno y no existe un liderazgo colectivo que pueda atender con denuedo todos estos problemas. Problemas de abastecimiento de agua potable 600,000 familias no reciben el vital líquido; tanto el transporte público como selectivo se han convertido en una calamidad para todos; la inseguridad pública va en crecimiento y han aparecido nuevas bandas delincuenciales en el país y se han extendido a otras provincias; la falta de medicamentos en las farmacias publicas sigue creciendo y ahora las
autoridades de salud han encontrado una solución salomónica, lo cual es extender por un año los registros sanitarios, anuncio hecho desde el claustro de la Cámara de Comercio, Industria y Agricultura de Panamá; el constante alza de precios en los productos alimenticios es una situación que está afectando a toda la población y en especial a los humildes y pobres del país.
Falta de un estadista y de visión para resolver todos estos problemas!
Estos son algunos problemas de lo más sensitivos porque aún faltan otros, es lo que la población siente con más ira en vista de que observa en sus gobernantes el desaliento y desgano por resolverlos y la gente hará lo que tenga que hacer por salvaguardar su vida, porque lamentablemente no está en las mentes de estos gobernantes políticos empresarios en resolverlo y si acaso dar algunos paliativos para acallar voces de, protestas, tal cual dijo el presidente Varela, que los panameños son unos ñañecos porque de todos nos quejamos; pues si señor presidente, ¡si tenemos hambre nos quejaremos!, ¡si no tenemos agua nos quejaremos! y ¡si no tenemos medicamentos, igual nos seguiremos quejando!.
Sepa usted ciudadano Presidente, que sí nos vamos a seguir quejando mientras exista un hambriento, un sediento, un enfermo, como un mal servicio en el transporte público.
La Central Nacional de Trabajadores de Panamá, es consciente de que ya no queda liderazgo ni estadista en el sector político empresarial, puesto que ellos solo se sirven del erario público y de los negocios como activos del Estado para seguir enriqueciéndose para continuar distribuyendo más, más pobreza y miseria.
Queda la oportunidad de que la clase trabajadora junto a los sectores patrióticos, democráticos, populares y progresista asumir el poder político y liberar a este país de las garras neoliberales y de los sectores políticos empresariales corruptos y le demos un nuevo Estado y una nueva sociedad a nuestro pueblo.
Panamá, 17 de agosto de 2016.
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