En nuestro país, la situación es caótica, muchos trabajadores se han quedado sin trabajo y sin ingresos para sostener su familia, el gobierno central ha ejecutado programas que no han llegado a todos los sectores, entre ellos tenemos el bono solidario, las bolsas de comida y el vale digital, que no cubre las necesidades básicas de la población, algunos otros sectores solidarios han contribuido modestamente, ayudando a personas muy vulnerables.
El sector privado salvo ciertas empresas han colaborados con sus trabajadores asegurándole sus puestos de empleos y salarios, seguridad con los implementos necesarios para preservarle la salud, incluso el transporte, actuando de forma más solidaria.
Algunos empresarios pareciese que sus negocios quebraron el mismo día en que decretaron la emergencia nacional, es una tristeza que empresarios panameños no se hayan comportado a la altura del problema del Covid-19 global y abandonaran a su suerte a sus trabajadores a nivel nacional.
No conforme con su actitud hipócrita y egoísta, ahora ambicionan arrebatarles a los trabajadores sus derechos y conquistas laborales y sociales con las nefastas reformas al Código de Trabajo.
Nos encontramos en una situación delicada y hay que examinar cuál pudiese ser la salida en que todos ganemos de forma equitativa, dónde todos aportemos y seamos escuchados.
El país debe ser reconstruido, el modelo económico neoliberal colapsó, no se puede recuperar una economía cuando sus resortes están quebrados y podridos, necesitamos una nueva plataforma económica con soportes sólidos.
Donde la economía del país no se base exclusivamente en el sector privado, sino que necesitamos cooperativas de producción agroalimentario; conglomerados agroindustriales y logísticos; parques tecnológicos; el desarrollo de la industria liviana y pesada e impulso de la investigación y la innovación.
Necesitamos un país basado en el multilateralismo en el campo de la relaciones internacionales; con sólida y elevada formación técnica-profesional; apoyando la reciprocidad en el comercio mundial de cooperación mutua y del respeto y además, con políticas de Estado en todos los órdenes del desarrollo económico y social sobre la base científica de la planificación y además, sobre la base de un Nuevo Estado Nacional, democrático, incluyente y participativo, cuyo centro gire en torno al ser humano.
La Central Nacional de Trabajadores de Panamá, plantea la reconstrucción económica, social y política del país, pasando por un verdadero dialogo nacional, en que todos los sectores que lo conformen estén representados, rompiendo con paradigmas ya obsoletos. Resistir y vencer.
¡Venceremos!
Panamá, 25 de julio 2020
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