Hablando de profesiones, de oficios sin lugar a dudas todo cambia y las profesiones, formas de trabajo se adaptan a los cambios o sucumben. La revolución tecnológica ha estremecido al mundo, en consecuencia al mundo laboral, la toma del poder mundial por parte de las transnacionales, el dominio del imperio con su política neoliberal, inclina la balanza para que todo lo que produzca la ciencia se convierta en dinero para ellos, a costilla de los trabajadores.
En Panamá prácticamente se acabó con la industria del Calzado, ahora ya todo es importado, quedando miles de trabajadores sin empleo, los que insistieron en seguir en la rama han quedado reducidos a pequeños talleres de reparación de calzados. Igualmente ha ocurrido con grandes fábricas de confección de ropa.
La ciencia avanza y seguirá avanzando por tanto la tecnología fría y sin humanizar, crea desempleo, hambre y desesperación. Las oficinas administrativas de las empresas han reducido su mano de obra ya que habían
departamentos con 20 personas ahora laboran 8 personas, el sector telecomunicaciones cuando era estatal tenía cerca de 4000 trabajadores hoy llega a cerca de 1200, otra forma devastadora es la tercerización para restar beneficios sociales y económicos a los trabajadores.
La robotización también ha llegado a Panamá y se encuentra en varias empresas incluso en la distribución de medicamentos, ya está llegando información de que cerca de cien millones perderán sus empleos para el 2025, por la adopción de la tecnología cognitiva, lo cual afectará la mano de obra de los Call Center, por lo que las empresas deben re entrenar a sus trabajadores, incluso nuevas formas de contrataciones.
El empresario panameño solo piensa en el ahorro y ese ahorro es reduciendo la planilla, vemos por ejemplo en las farmacias que una sola persona atiende las recetas, es cajero, incluso asea la farmacia al entrar y al salir, en las grandes cadenas se ha optado por reducir el personal que atendía los pasillos, ahora que el cliente se atienda solo, y la presencia de cientos de cámaras vigilando a la clientela y a los propios trabajadores.
El sindicalismo como institución también tiene que evolucionar porque todo cambia y debe estar a la altura de los acontecimientos, ello involucra a los miembros, a sus dirigentes, que deben estar actualizados, deben manejar las
herramientas que le ha brindado la ciencia, utilizarla para la lucha en defensa de los trabajadores y del pueblo.
Por: Gregorio Quintero
