La política nacional desde hace décadas impone la importación de capital extranjero, lógicamente vienen las transnacionales y los gobiernos con la finalidad de que vengan a nuestro país y de hacer negocios también, les ofrecen de todo, hasta que no habrá problemas con los sindicatos, y que primero serán ellos y solo ellos.
Una mirada solamente a la nación y nos daremos cuenta que se está transnacionalizando al país, ¿Pero a qué precio?
Hoy señalamos, el caso de la empresa Petaquilla Gold, quien beneficiada con todo lo que le ofrece el país, lo primero que hacen es cesar a los trabajadores, no pagarles sus salarios, sus prestaciones y no pagan la cuota obrero patronal, a pesar que se la descuentan a los trabajadores.
Eric De León dirigente del Sindicato Industrial de Trabajadores de las Empresas Mineras de Panamá- SITRAEMINP- viene denunciando que desde el 26 de diciembre de 2013 esta empresa cesó operaciones, desde ese día las tinas de relave no han sido tratadas, para evitar derrames.
Advierte además que con la entrada de la estación lluviosa, se corre el riesgo que se produzca un desbordamiento y vayan a parar esas aguas contaminadas al río San Juan.
Se conoce que la Autoridad Nacional del Ambiente, realizó una inspección en la mina, encontrando irregularidades, por lo que se tramita una multa.
La situación para los trabajadores se ha venido agravando y se han hecho varias acciones sindicales, como protestas en las calles, tranques, volanteos, de forma tal de que se visibilice los problemas de los trabajadores mineros en Panamá.
Mientras estos problemas se dan, la empresa hacía movimientos para salvar sus capitales, por lo que hoy se conoce que Petaquilla vendió por 60 millones de balboas sus activos, a la canadiense First Quantum.
El reclamo de 900 trabajadores está latente, así como demandas de los proveedores.
Ahora no hay gobiernos responsables, solo se interesan en darles el visto bueno para que las transnacionales entren al país, pero no les exigen que respeten la Constitución, el código de Trabajo, los Convenios de la Organización Internacional del Trabajo, así como los Acuerdos globales firmados con los sindicatos a nivel mundial, que deben respetar y cumplir en cada país que lleguen.
por: Erick Lopez