La Federación Nacional de Empleados Públicos, FENASEP, considera que la celebración del 125 Aniversario del Martirologio de Chicago, es momento oportuno para repasar los abusos cometidos contra los trabajadores en los últimos tiempos, por nuestro único empleador: El Gobierno Nacional.
Después de mucho prometer en campaña que la carrera administrativa se respetaría, hoy existen más de 35 mil despedidos sin fundamento jurídico, en base a una interpretación retorcida de la norma, violando el debido proceso y desconociendo el pago de los pasivos laborales, que según la ley, deben atenderse en un máximo de 30 días.
La violación del fuero sindical, de maternidad, de longevidad, el despido de trabajadores con protección especial por padecer enfermedades crónicas involutivas y/o degenerativas, o discapacidades, dejando de aplicar incluso, modificaciones introducidas por la Ley 43/09 (de la autoría del actual gobierno), cuya retroactividad se extiende a julio del 2007; el desconocimiento de derechos laborales, sociales, económicos y políticos, son demostraciones del menosprecio que se le profesa al trabajador público responsable, pese a las estadísticas de crecimiento y desarrollo del Estado.
El desgano para hacerle frente al pago de las seis partidas del XIII mes adeudado a ex trabajadores y trabajadores de sector público, con todo y que la Ley 19/09 convierte esta deuda en un derecho adquirido, se concreta en no designar un solo céntimo en el presupuesto para ese propósito.
El ajuste antojadizo y caprichoso al salario mínimo de los servidores públicos es otra imposición prepotente, ya que los ajustes previos se equipararon a la gran empresa, criterio pisoteado por el actual Gobierno. La Ley carcelazo para cercenar el derecho ciudadano a la protesta, el episodio sangriento de Bocas del Toro, que produjo muertos, heridos y lisiados, la represión brutal a los pueblos originarios de San Félix, que dejó otro cuadro de innecesarios atropellos; el asedio indiscriminado contra periodistas, trabajadores, ecologistas y ciudadanos que denuncian corrupción o poca transparencia en las actuaciones de algunas autoridades, la reforma electoral para beneficio propio; la reforma constitucional para hacerse un traje a la medida, son
razones más que suficientes para ejercer el derecho a la protesta este primero de mayo.
El excesivo poder concentrado en el Ejecutivo, que afecta la independencia de los Órganos Legislativo y Judicial, hecho que acrecienta vertiginosamente la desconfianza de los panameños en la institucionalidad, el incremento de impuestos y la amenaza de nuevos impuestos, la escalada inflacionaria indetenible de los alimentos que consumimos diariamente los panameños, sobre todo, los más pobres; el aumento del transporte público, la publicidad engañosa para promover a través de los medios proyectos ficticios o poco eficaces (Según el Ing. Roy, Director del METRO, la tercera línea, será imposible, la segunda también y la primera probablemente, es decir, no es real, el METRO Bus se atasca en el tráfico lo mismo que un desvencijado Diablo Rojo, al punto que el pueblo con su ingenioso humor, ya lo bautizó como Metro Diablo); entrega de dádivas (el gobierno promueve salarios miserables), que no resuelven estructuralmente el problema de la salud, educación, creación de empleos, desigual distribución de la riqueza en nuestro país. Toda esta amalgama de penalidades afectan principalmente a los trabajadores y entre ellos, a los servidores públicos de base, razones más que suficientes para concurrir este primero de mayo a la calle, a dejar sentada nuestra inconformidad con este estado de cosas.
No asistir es avalar y aceptar silenciosamente que nos sigan atropellando.
FENASEP, se avoca a la celebración de su XI Congreso Ordinario, “Por el Derecho al Trabajo, Estabilidad y Sindicalización”. Por lógica consecuencia, estamos dispuestos a seguir luchando por nuestros derechos, tal como lo recomienda el propio Presidente Martinelli (en el funeral de Flaco Bala). Pues bien, le tomamos la palabra, porque lo primero que haremos será relanzar una campaña promovida por la Internacional de Servicios Públicos ISP, por la ratificación de los Convenios 151 y 154 para el sector público. Exigimos una ley general de sueldos que erradique el clientelismo, compadrazgo y nepotismo a la hora de otorgar los sueldos en nuestro sector; un aumento general de salarios para enfrentar el alto costo de la vida; congelamiento del precio de los alimentos que consume el pueblo, ajustes dignos al salario mínimo, la devolución de las 6 partidas y mejorar el método de cálculo para el pago del XIII mes es decir, derechos plenos para los trabajadores públicos, y el restablecimiento de la carrera administrativa y legislativa pero estas demandas sólo serán efectivas con la solidaridad de todos, por ello, es imprescindible la participación de todos y todas este 1° de Mayo…Plaza Porras 8:00 a.m., … no faltes.
ALFREDO BERROCAL AROSEMENA
Secretario General.
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