Estudias o Trabajas….

ESTUDIAS o TRABAJAS? Por: Lic. Erick Graell López
Realmente hoy se escribe mucho sobre la juventud, pero siempre en cada época se han hecho investigaciones, de que si son deportistas, que a qué edad inician su vida sexual, sus inclinaciones por el arte y cuanto se ha querido investigar, de forma tal que los estudiosos puedan hoy tener una idea del comportamiento juvenil.
Leía hace unos años que en Europa por ejemplo los jóvenes no se estaban casando a temprana edad, mejor dicho no se querían casar, preferían decía el estudio o investigación que preferían vivir con papá y mamá, así de sencillo, sin ningún compromisos.
Ahora es decir hace unos años se ha popularizado la frase Los NINIS, gracias a un popular programa televisivo en Panamá, que satiriza la situación. Hace un mes leo un informe que se rindió en UNICEF donde el exponente se refería a los NINIS, y ya a estas alturas se estaba consolidando la palabra NINI.
Se trata entonces que ya a nivel de países, de gobiernos, de organizaciones internacionales se está viendo el fenómeno de los NINIS, en referencia a los jóvenes que no estudian, ni trabajan.
Ya las estadísticas panameñas destacan que existen 203 mil Ninis en nuestro país, que incluye esta muestra entre jóvenes de 15 y 29 años, esto hasta marzo de 2013.
Las cifras van en aumento, otra información refleja que la cantidad es de 3.4% por año, sacando cuentas se concluye que de 907mil 255, jóvenes entre 15 y 29 años, de allí el 23% son panameños que no estudian ni trabajan.
Es una realidad estos jóvenes le encarecen la calidad de vida a sus familiares y al Estado, ya que al no tener trabajan no cotizan al seguro social, mucho menos pagan seguro educativo, etc., y ni siquiera se preparan académicamente para enfrentar la vida.
Otro dato interesante es que en esta situación el pandillerismo creció entre 2007 y 2012 un 41%, o sea 23 veces más que la generación de empleo, en números concretos, existían 1,385 pandilleros y a 2012 habían 7, 500, imagínense que hoy se puede decir que el desempleo juvenil aporta el 60% de las 70 mil detenciones que efectúan los organismos de seguridad anualmente.
Estas cifras frías quizás no digan mucho de lo que realmente está ocurriendo, pero el fenómeno está allí, y los trabajadores organizados debemos levantar nuestra voz, nuestra conciencia, del porque esto sucede, pues no son los jóvenes los culpables, es el sistema imperante, los gobiernos que no se interesan por formar al hombre para que viva con dignidad, con decoro.
Tenemos que levantar nuestra voz de protestas y exigir una mejor educación y acceso gratuito a la misma sin discriminación, exigir mayor formación profesional, exigir empleo pleno y no abanicar el trabajo informal, que es con el que se trata de enmascarar el real desempleo que existe.
También hay que alertar al trabajador como tal, al padre, a la madre ya que tenemos gran responsabilidad en esta situación, no debemos ser patrocinadores de esta situación e inculcar en los hijos el sentido de responsabilidad, que hay que estudiar, que hay que trabajar, pues ellos tendrán hijos después y no puede ser que los abuelitos tengan que estar tirándoles la toalla todavía.
NO se trata de castigos, ni de maltratos sino de enseñar, de darles ejemplos también de padres responsables, acérquense a los sindicatos y discutan y debatan como las organizaciones también pueden ayudar a nuestros hijos en la formación en la lucha para exigirles a los gobiernos una mejor educación, así juntos resolveremos muchos problemas, ya que los sindicatos no solo son para atender boletas en el ministerio de trabajo, deben también ligarse a los problemas sociales del pueblo.